Escuer y Bernal

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14 de febrero de 2011

MICRORRELATOS AMOROSOS

Marcial Fernández

MARITAL
Mi mujer no me comprende. Cree que la quiero.

VIEJA TRADICIÓN
Le declaré mi amor y ella me regaló su corazón. Qué magnífica fue nuestra ceremonia. Aún me tiembla el alma al recordar la serenidad del sacerdote, el júbilo del pueblo y el llanto de los familiares cuando, en lo alto del templo, levanté con ambas manos ese órgano sangrante en ofrenda a los dioses.

SECUESTRO
Creí ganarles la partida, pero los secuestradores arruinaron mi matrimonio. Desde el día del plagio fui paciente en la negociación. Recibí de los criminales una oreja. Luego un dedo, el pie, la mano y poco a poco la reconstruí.
Cuando los plagiarios se percataron de su error, no quisieron entregar la última pieza. Mi esposa, entonces, se volvió fría, distante, ajena a cualquier sentimiento, una mujer sin corazón.

AVISO OPORTUNO
Actor porno, eyaculador precoz, busca empleo para cortometrajes.

CAUSAL DE DIVORCIO
Le dije:
—Agarra tus chivas y vete.
Era imposible convivir con tantos animales.


CENSO REAL
Cuando la ciempiés perdió sus zapatillas al salir del baile, en el reino surgió el mito que a cada hombre le correspondían 50 mujeres.

RODOLFINO, CALCETINES ROJOS
Aunque todos lo detestan, Rodolfino es mi único amigo. Tal vez por eso los demás niños me pegan, me patean, me dan de cabezazos. Eso, claro, hasta que llega Rodolfino los aparta, me coge entre sus manos y dice:
—Basta, se acabó el juego, la pelota es mía y me la llevó a casa.

COSAS DE FAMILIA
Afrodita, quien nació antes que su hermana Venus, era ambiciosa, cruel y tenía celos de la hermosura de su gemela. Por eso la mutiló y le hizo un retrato en mármol para que las generaciones venideras sólo recordaran la belleza de la propia Afrodita. Hoy, sin embargo, la única fascinante es la Venus de Milo.

SWINGERS
Ninfómana, su mujer siempre quiso a un tigre en la cama. Resignado decidió complacerla. Desde entonces vive los encantos de la viudez.

LA PÓCIMA SECRETA
…dama, caballero, pásele si desea un romance como el de Romeo y Julieta, un amor de historia, pásele y compre este frasquito que lo convertirá en un Montesco, en una Capuleto, pásele y por sólo 5 pesitos adquiera la pócima secreta, la de los enamorados de la tragedia y désela a beber a su novia, y luego bébala usted mismo, pásele, dama, caballero, pásele a la vida eterna…

21 de junio de 2009

UN CUENTO DE AMOR

Marcial Fernández

Rudolf, con la cabeza levantada y reclinado en su cadencioso cuerpo la miraba con sus profundos ojos verdes. Ella, esbelta y apetitosa, bailaba enfrente y en torno a Rudolf apenas sin tocar el suelo. Él -es de suponerse- estaba en posición de ataque, con esa nerviosidad serena que siempre le fue tan característica. Ella, seductora, como si no se diera cuenta de la situación, seguía exhibiéndose alegre y provocativa. Rudolf, entonces, de un sólo movimiento atrapó entre sus fauces gatunas a la mariposa, y, de dos mordidas, se la comió.

MEFISTÓFELES

Marcial Fernández

Mefistófeles, como un acto más de perversión, decidió venderle su alma inmortal al doctor Fausto, quien le procuró vejez, ignorancia y nulos poderes mágicos. Con ello, Mefistófeles acrecentó su virtuosismo: nunca hasta entonces odio tanto a la humanidad; nunca hasta entonces se sintió tan dichoso. Felicidad sólo comparable con el horror de su condena: vivir en el cielo.

LA ESCUELA DE ELEA

Marcial Fernández

-El movimiento no existe -dijo muy quieto un profesor de filosofía.

"Es un hecho: para atrás y para adelante no hay nada", puntualizó. "El pasado y el futuro, en cuanto entidades de realidad, no son sino una mera ficción. ¿Qué nos queda? ¿El presente? Tampoco, ya que a cada momento se convierte en pasado y a cada momento se convierte en futuro. ¡Oh, terrible inmovilidad! Pues si me muevo -y el profesor se movió-, vean qué sucede".

En el salón sólo hubo murmullos e incertidumbre, pero se comprobó la tesis del catedrático: no sucedió nada.